En NUESTRA FARMACIA, el programa de la Federación Argentina de Cámaras de Farmacias FACAF en EL PROVINCIAL dialogamos con el Dr. Julio Nemerovsky sobre el curso de formación técnico-profesional gratuito para un área del cuidado de la salud con alta demanda laboral: “Cuidado de Personas Mayores con Dependencia”.
En un mundo donde las expectativas de vida son cada vez más altas y las tasas de natalidad se reducen cada año, el cuidado y la atención de las personas mayores adopta un lugar clave en el abordaje de las agendas de la Salud Pública.
Atendiendo este nuevo escenario del Siglo XXII, la Facaf estableció una de una alianza estratégica entre el Centro Integral de Estudios Farmacéuticos (CIEF), la Cámara de Farmacias Bonaerense (CAFABO), el laboratorio CASASCO y la Municipalidad de Morón para realizar un curso de formación técnico-profesional gratuito para un área del cuidado de la salud con alta demanda laboral: “Cuidado de Personas Mayores con Dependencia”.
Uno de los especialistas convocados para esta capacitación es el Dr. Julio Nemerovsky, Médico egresado de la Facultad de Medicina de la UBA, especialista en Clínica Médica y Geriatría y presidente de la Sociedad Argentina de Geriatría y Gerontología.
Nemerovsky explicó que el curso «intentará otorgar a los quienes se encargan del cuidado de los mayores, tanto los formales -como enfermeros o cuidadores- como los informales, que son las familias que acompañan, herramientas integrales para que puedan abordar la problemática de una persona que empieza a cambiar física y mentalmente por el paso del tiempo«.

En una charla con El Provincial para Facaf, Nemerovsky se refirió a diversos aspectos relacionados a su especialidad y al curso que organizan las instituciones farmacéuticas, Casasco y el municipio de Morón.
¿Cuál es la importancia de este tipo de capacitaciones y por qué orientado a personas mayores?
Esta propuesta es muy interesante. Hemos empezado este curso que consta de seis encuentros en los que abordaremos los diferentes planos del tratamiento de los adultos mayores.
¿Cuál es la diferencia entre Geriatría y Gerontología?
La Geriatría es una especialidad médica, dedicada a abordar las cuestiones de salud y el tratamiento de la enfermedad de personas mayores. Está vinculada con la prevención y promoción de la salud de los mayores.
La Gerontología se dedica a estudiar la evolución y el curso vital de esta etapa de la vida. Es la etapa más larga de la vida. La niñez se extiende por poco menos de 10 años, la adolescencia y juventud serán otros 10 o 12 y la adultez se extiende por unos 20. Pero el adulto mayor puede vivir 25 o 30, y en estos últimos años la esperanza de vida se ha extendido, así que puede ser aún más extensa. Por lo tanto, se trata de una etapa de la vida que requiere de una visión específica.
A medida que envejecemos cambia la anatomía y comienzan a concurrir enfermedades propias de esa evolución.

¿Hay enfermedades típicas de la vejez?
La hipertensión no es una enfermedad de la vejez. Los primeros síntomas comienzan por lo general a los 40 o 50 años. Enfermedades como Parkinson comienza a los 55. Pero lo que ocurre es que en la etapa de adultos mayores se pagan las consecuencias de haber vivido y haber arrastrado todos esos problemas de salud.
La gerontología se ocupa de todos los aspectos de la vejez: sociales, demográficos, culturales. Un abogado previsional es un gerontólogo porque se especializa en un ítem que concierne directamente a los mayores. Un enfermero de personas mayores es un gerontólogo, porque atiende el día a día de un adulto mayor. Y también lo es un periodista que informa sobre estos temas específicos.
¿Cuál es la importancia y para qué se realiza este curso que impulsa la alianza de Facaf con otras entidades?
Nosotros consideramos que hay dos tipos cuidadores para los ancianos. El el formal y el informal. El formal es quien realizó algún estudio o formación y está habilitado para el tratamiento. Y el informal es aquel integrante del entorno familiar que tiene la responsabilidad de acompañar y asistir al mayor. Esta última persona a veces se ve sometido a situaciones por la dependencia, por las diferencias de orígenes, de formación y otras por las cuales no tiene elementos para responder y resolver situaciones que se dan en lo cotidiano.
Este curso concede herramientas al acompañante formal y también al informal, sobre el cuidado de las personas mayores. Nos basamos en el saber teórico.

¿Saber qué? Qué está sucediendo con esta persona que cambia lenta e irreversiblemente.
Saber cómo enfrentar esos cambios y también aportar un saber ético. El saber actitudinal, qué hacer con estas personas en cada una de las situaciones que se presentan.
Esta persona con dependencia, además de tener esa dependencia, tiene cambios estructurales que hacen a la vejez y que deben ser atendidos de manera específica.
El primer ministro de Salud y sanitarista, Ramón Carrillo, decía que, con relación a la vejez, en materia de salud, sin calidad no había justicia. Brindar conocimientos a una persona que cuida a personas mayores es brindar calidad de servicios.
Un maestro que tuve y siempre recuerdo, Ruiz Perlado, de España, decía que no hay que hacer buena gerontología porque hay muchos adultos mayores en la sociedad moderna, sino que hay que hacerlo porque esa persona merece tener un buen cuidado en la última etapa de su vida.

¿Como se organizó la capacitación?
En los módulos de septiembre a noviembre, estamos dando diferentes enfoques del tratamiento de los mayores. Dimos una introducción a la gerontología orientado al saber actitudinal.
En el segundo, vamos a trabajar sobre los cambios biológicos, la salud y la enfermedad. Cómo se presentan de manera diferente. Porque todos deben saber que, entre los mayores, las enfermedades se presentan en forma diferente y por lo tanto los tratamientos y la atención deben ser diferenciadas.
Por ejemplo, es raro que un mayor comience una enfermedad con fiebre, por eso tenemos que saber cómo empieza una enfermedad, como se manifiesta, como se presenta. Porque se debe actuar con celeridad porque caso contrario podría transformarse en irreversible.
Otro módulo aborda la problemática de cómo enfrentar los cambios y las limitaciones en movilidad. Otro tiene que ver con el cuidado específico de los mayores a cargo de un especialista en capacitación sobre mayores que dictan en la Amia
Vamos a tener un módulo sobre cambios psíquicos, físicos y psiquiátricos de las personas mayores, a cargo de una gerontopsiquiatra reconocida del país.
¿Qué debe ofrecer un curso como el que impulsa Facaf?
Una visión integral del tratamiento. Una formación holística que abarque todos los conceptos de la humanidad. No hay nada más humanitario que una madre cuidando a un hijo o un hijo cuidando a un padre. La mujer tiene ventajas, porque la cultura le otorga algunos elementos necesarios para ser buena cuidadora. Pero muchas veces hombres y mujeres se ven en la obligación de cuidar y no tienen herramientas. Porque no hay dos personas mayores iguales, ni siquiera parecidas.
Conocemos casos de gemelos que son totalmente diferentes. No le podemos atribuir a esas diferencias factores genéticos, porque ambos tienen los mismos. Pero hay otros factores externos que influyen en cómo llegaron a la vejez. Cada uno tiene un envejecimiento diferente.
Estas diferencias deben ser percibidas en estos cursos. Pensando en esta concepción humanista y en la heterogeneidad de la gerontología.
¿Faltan médicos dedicados a esta especialidad en Argentina?
La Sociedad Británica de Geriatría tiene un estudio que dice que se necesitan 20 médicos por cada 100 mil personas mayores de 60 años. Ese número se incrementa a partir de que avanza expectativa de vida de las sociedades.
En Argentina se hizo en 2022 una publicación donde colaboramos y donde la Dirección de Capital Humano del Ministerio de Salud registró 680 médicos geriatras en todo el país. Eso nos da 9,8 médicos cada 100, menos de la mitad de lo requerido.
Sin embargo, existe lo que se llama la «geriatrización» de la medicina. Los recursos sociales y sanitarios están copados por la asistencia de personas mayores, no necesariamente por enfermedades. Pero eso hace necesario llegar a este número mínimo de profesionales para atender a los adultos. Los 3 países más envejecidos son Japón, Italia y España. Ellos también tienen déficit de médicos. Es una realidad del mundo: la población está envejeciendo. Hace falta cada vez formar más profesionales.
En cuanto a los jóvenes médicos, hay cada vez más inquietud por conocer esta disciplina. Hay muchos especialistas como cardiólogos que reconocen que atender a un mayor no es lo mismo que a un no mayor. Esto llevo a que haya un consenso de cardio geriatría. Los cardiólogos se forman metódicamente para atender mayores. También está la oncogeriatría, que buscan maneras de atender correctamente a los ancianos.
Cuidar a un mayor merece una atención especial, mas allá de lo que se entiende por cuidar a otro. Los mayores se merecen ser atendidos con una responsabilidad que excede el mero hecho de la ciudad de un paciente.
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