Marcelo Muchi desde EL PROVINCIAL dialogó con Daniel Busson, un joven de 33 años detenido hace 11 años y 6 meses en el Penal de Campana condenado a perpetua que dice ser inocente.

En el inicio de la conversación lo consultamos sobre cómo se desarrollan sus días dentro del lugar de alojamiento y nos dice que está detenido “hace 11 años y 6 meses. Y un día mío acá adentro es despertarme a las 7:00 de la mañana, prepararme para la abierta que sería cuando le sacan los candados a la puerta del pabellón, después prepararme para desayunar algo y salgo a la huerta, ya que tenemos una huerta orgánica, un parque y estamos en el sector de las 9 hasta las 10:30, luego ingreso otra vez el pabellón. Me cocino algo, compartimos algo con los chicos. Luego hacemos limpieza general hasta que sean las una y media o dos de la tarde hasta que retomamos salir el otra vez al parque y regresamos a las cuatro, a las cuatro y media más o menos y otra vez el reintegro del pabellón, hasta que llega la hora del engome y me voy a dormir”.

Cuando le hicimos la segunda pregunta aclaramos que la intención de la entrevista no era hablar o revolver el pasado, sino pensar y hablar de su futuro, es por ello que simplemente le pedimos que de manera sintética nos resuman por qué fue detenido.

Daniel Busson dijo que “me detuvieron después de 14 días del homicidio de Lucas (Lucas Melo falleció en un intento de robo el 7 de abril de 2013 en la zona sur de Zárate). Voy a una rueda de reconocimiento y ahí un matrimonio que me apunta a mí y a otro chico que está en la causa conmigo. Dicen que había uno con Barbita, en se momento yo tenía, y el otro con la oreja cortada. Me apunta a mí, me hace dar un paso al frente. Sinceramente, no sé cómo la policía llegó a mi domicilio y me llevaron a mí sabiendo que yo no tuve participación en el hecho ni siquiera crucé por el lugar ese día ni cerca ni, uno o días anteriores. Nunca crucé por ese lugar”.

Retomamos la entrevista para el lado de su permanencia en el interior de la Unidad 21 de Campana y lo consultamos a Daniel respecto a su relación con su compañero y manifestó que “las relaciones de lo con los chicos acá adentro es normal, digamos. Como un chico de afuera de la calle. Mi relación es compartir de un mate, charla historia de vida anécdotas, contar mi situación, además hay mucha empatía poniéndose uno del lado del otro. Eso se ve mucho acá y también he conocido a muchas personas que me han apoyado, me han asesorado con los conocimientos de ello y digamos es como más o menos normal del lado de afuera. Hoy en día, me encuentro en un pabellón literario tranquilo, que está en mucho el diálogo, se trata mucho sobre la literatura”.

Ahora su causa está en la segunda vocalía de la Corte Suprema de Justicia de La Nación, ya hay una gran cantidad de amicus curiae y evidencias nuevas, todo depende de la Corte, y de los jueces para lograr su libertad.

Respecto a esto Busson imploró que “espero y deseo de todo corazón que la Corte conteste con algo positivo que sería mi libertad inmediata o un nuevo juicio. Yo creo que con todas las herramientas que tenemos y el apoyo de las organizaciones, que son 14. Creo que ya tenemos todo lo necesario mínimamente para ir un nuevo juicio, pero lo que espero y deseo de todo corazón que la Corte me absuelva, porque quiero estar otra vez en mi casa con mi familia”.

Daniel qué pensás del futuro, cómo te imaginas ese día que traspases la puerta y vuelvas a ser una persona libre, le preguntamos y la verdad nos sorprendió su respuesta, especialmente en la primera parte cuando dijo que “la verdad, no sé bien cómo imaginármelo, porque después de tantos años no sé bien cómo sería la realidad del otro lado”, pero más adelante continuó diciendo que “lo primero que me imagino es a mi familia esperándome, para ir a algún lado a compartir una comida, una salida con ellos, eso es lo que realmente me gustaría hacer el día que me llegue la libertad. Poder disfrutar a las personas que tuvieron a mi lado luchando todo este tiempo y sufriendo y padeciendo lo que yo sufrí, porque, así como lo sufro yo también lo sufre y lo padece mi familia”.

Sobre la importancia de su familia y de Lucía su pareja dijo que “mis viejos fueron el motor de arranque para no quedarme decaído. Ellos fueron un motor de arranque en mucho sentido que me ayudaron a enfrentar esta situación injusta. Y después, con el tiempo conocí a Lucía que naturalmente fue un ángel caído del cielo porque yo hasta el día que la conocí estaba en la nada solamente esperando que me conteste la Corte y tan solo cuando le compartí y le comenté lo que yo tenía hasta entonces de mi causa ella, que recién estaba en primer año de la abogacía me dijo que yo no tendría que estar acá, que estaba todo mal que había muchas fallas, muchas contradicciones que yo no tenía que haber estado nunca en el penal. Gracias a Dios la conocí a Lucía y la causa dio un giro de ciento por ciento. Hoy en día ya tenemos muchas cosas a favor y sinceramente tengo tranquilidad que todo se va a aclarar y va a salir todo bien.

También con este joven de 33 años hablamos de sus sueños y respondió que “sí, sí, tengo mucho sueño, retomar mi vida y poder rehacer mi familia, formar mi familia.  Eso sería lo principal”.

Llegó el momento de culminar esta charla y simplemente le dijimos si quería agregar algo y Daniel Busson expresó que “quiero agradecer a las asociaciones que están luchando conmigo. Primeramente, a Lucía, a mi familia, mis padres, mi madre y mis hermanos, que de un principio estuvieron luchando conmigo. A Lucía que cuando tuvo conocimiento de esta injusticia empezó a moverse y a golpear puertas hasta que la escucharon y así hoy en día la causa está en una instancia, digamos dentro de todo con esperanza positiva. Eso sería lo que tengo para agregar”.

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