El ultramaratonista Javier
Zannino dialogó con Horacio Tellechea y Agustín Betancor en CAMINO
ULTRA VIDA por EL PROVINCIAL Radio Online.
En el suelo del tiempo, escribimos los garabatos que llamamos historia
y Javier Zannino, no detiene su paso, rubricando su accionar con la
hazaña de la obtención, en 2018 y 2019, del «Circuito Argentino de
Ultramaratón», además de ser finisher en el mítico Spartathlon, donde la
«Legión Argentina 2019», se convirtió en el sexto país con mejor
performance, habiendo clasificado a nada menos que nueve deportistas que
llegaron a los pies de Leónidas, prevaleciendo sobre naciones que
son históricas potencias mundiales, en actuaciones desde lo individual y
colectivo, con desempeños épicos, en nada exagerados en su calificativo,
en virtud de las proezas alcanzadas por nuestros representantes.
Platense de nacimiento, bellavistense por adopción, aún recuerda con emoción
cuando siendo muy joven, iba corriendo a visitar a sus abuelos, que vivían
a cuatro kilómetros de su casa, tomaba mates y luego volvía a su hogar,
completando unos 8 kilómetros de carrera; tenaz, perseguidor del aquí
y el ahora; radicado en la ciudad de Bella Vista, Corrientes, su lugar en el
mundo, vive por encima de todo, la libertad de luchar por sus ideales, poniendo
el énfasis cuando destaca: «Siempre les digo a quienes entreno: Que
tus sueños sean más grandes que tus miedos. Es normal sentir miedo ante un
desafío en la vida, pero es de valientes enfrentarlo, por seguir y
concretar tus sueños».
Inspira entusiasmo, fuerza y el anhelo de un mundo mejor; considera que la
felicidad, reside en el trabajo bien hecho, la comunicación con sus
semejantes, siendo un agradecido a la vida por haberle permitido
aprender una profesión que le apasiona, afín a su realización personal y
la de sus alumnos; si bien le gusta la música (Bon Jovi, Europe), disfruta
mucho correr escuchando los sonidos de la naturaleza, el viento, los pájaros,
sus pasos y respiración.
El escritor Jorge Luis Borges en «El Árbol de los Amigos»,
destacaba que, existen personas en nuestras vidas que nos hacen felices
por la simple casualidad de haberse cruzado en nuestro camino.
Algunas recorren todo el camino a nuestro lado, viendo muchas lunas pasar, más
otras las vemos entre un paso y otro. A todas las llamamos amigos y hay
muchas clases de ellos.
Javier Zannino, un amigo, que nos honra vistiendo la celeste y blanca,
no solo por sus grandes logros, sino también, por ser alguien que tiene a la ética como
su compañera y al compromiso con el juego limpio, su causa.